2021/02/20
Hoy retrocedemos en el tiempo para adoptar un enfoque más épico pero –esperamos– igualmente riguroso.
La batalla de Las Navas de Tolosa es un hito en el control del espacio peninsular y en el proceso de avance hacia la configuración del estado moderno. Sin duda, quedan varios siglos hasta que eso se convierta en una realidad reconocida. Pero en 1212 se da un paso que resultará decisivo en la perspectiva de los años posteriores. Los propios contemporáneos del siglo XIII consideraron la batalla como un acontecimiento determinante en la expansión conquistadora de los reinos cristianos peninsulares y, principalmente, en el definitivo retroceso de Al-Andalus.
El 16 de julio de 1212, en el puerto de Muradal de Sierra Morena, hoy Despeñaperros, actual provincia de Jaén, se enfrentaban un ejército europeo, feudal y cruzado, encabezado por Alfonso VIII de Castilla, aliado con Pedro de Aragón y Sancho VII “el Fuerte” de Navarra y un contingente islámico, andalusí y norteafricano, liderado por el Califa almohade Muhammad al- Nasir.
El documento que sigue, proviene de la colección “Batallas de la Historia”, editado en España por Osprey Military y Ediciones Prado, hoy de libre acceso. Su autor es J. C. Martins.