Domingo, 16 de febrero 2020.
53º 37,67’ S – 72º 45,48’W.
En el Pros, al día de Dios del 16 de Febrero del 2020.
Aquí el grumete.
Hasta ahora mi aproximación a la navegación, bastante reducida, se limitaba a costear. Una marinera de cama, playa y sol.
Ni yo misma sé muy bien cómo me encontré enrolada para el paso del estrecho de Magallanes … ¡Quién me lo hubiera dicho hace 10 años!.
El Estrecho es fascinante. Navegamos en pasillos con montañas de sorprendente vegetación al borde del mar y cumbres nevadas. Arcos iris increíbles.
Cada ensenada, cada paso nos recuerdan la gesta, aunque muchos de ellos hayan sido injustamente renombrados por los ingleses. Pienso en el hambre, la ropa mojada, el frío, el hacinamiento, el olor … y la desesperanza cuando la fuerza de las corrientes les hacía retroceder.
Lo pienso sobre todo cuando, con una increíble rapidez, el tiempo cambia y el viento se dispara por encima de los cuarenta nudos y naturalmente como siempre por proa. El Pros ciñe rozando su costado el agua.
Cuando apalancada con brazos y piernas a todo lo que me inspira una cierta solidez, miro a mis siete avezados compañeros, me tranquilizo: LES DIVIERTE.
Friqui